Georgia. Muere un hombre tras un abuso en prisión

Un hombre de 46 años, Ioseb Gorgadze, falleció ayer, el pasado 4 de mayo, tras tres meses de tratamiento en la clínica Vivamedi, donde fue trasladado de prisión a finales de enero con múltiples lesiones. Su abogado afirma que el preso fue «gravemente golpeado» bajo custodia y alega abusos por parte del personal penitenciario. Las autoridades desestimaron las acusaciones como «manipulación política» de una «tragedia humana» y afirman que no se produjo violencia.

La causa oficial de la muerte fue el trauma cerebral, según la directora de la clínica de Vivamedi, Zura Chkhaidze, quien dijo en televisión Pirveli que el prisionero fue admitido el pasado 30 de enero con «múltiples lesiones». El abogado del preso, Mukhran Ghurtskaya, dijo que su cliente tenía «unas 30 fracturas en cara y cabeza» y rechazó lo que dijo que eran intentos de los investigadores para afirmar que las lesiones eran el resultado de una caída en un baño.

«Desde que se ha establecido el hecho de la muerte, el Servicio Especial de Investigación ha abierto una investigación», dijo el abogado.

«No podría haber recibido estas lesiones sólo de una caída. También es imposible que sólo los reclusos hubieran podido hacerlo. El personal de la cárcel está presuntamente implicado», ha dicho el abogado, que ha criticado la investigación, que todavía no ha imputado a nadie.

El informe clínico de la cárcel de Gldani de Tiflis, antes del traslado de Gorgadze al hospital, no hizo mención alguna a las lesiones, diciendo sólo que había sufrido un ictus cerebral y necesitaba ser hospitalizado.

Ante la reacción, el Servicio Penitenciario Especial de Georgia emitió un comunicado en el que criticaba a los medios de comunicación por «utilizar una tragedia humana con fines políticos» y negar las denuncias de abusos por parte del personal de la cárcel, señalando que «ni el preso ni su abogado se habían quejado nunca de las violaciones de sus derechos en la prisión».

El servicio penitenciario también dijo que la salud del preso se «deterioró» el pasado 23 de enero, una semana antes de ser trasladado a Vivamedi, donde fue «controlado constantemente por el personal médico», pero los médicos no pudieron salvarle la vida después de tres meses. También señaló que la investigación está en curso y que «no se ha confirmado ningún incidente de lucha o violencia». Durante los tres meses que fue hospitalizado, la investigación no produjo resultados, nadie fue imputado y el Departamento de Investigación del Ministerio de Justicia había abierto una investigación en virtud del artículo 118 del Código Penal, que se refiere a lesiones en la salud.

El defensor público Levan Ioseliani dijo que su oficina ha estado involucrada en el caso desde el traslado de Gorgadze a Vivamedi en enero. Señaló que su representante se reunió con médicos, reclusos y personal penitenciario, pero no pudo hablar con el prisionero a causa de su condición.

Ioseliani añadió que la oficina del Defensor del Pueblo había revisado las imágenes de vigilancia cerca de la celda del prisionero, aunque no había cámaras en su interior. Prometió una investigación «profunda» sobre el caso.

Ioseb Gorgadze fue detenido tras el accidente de coche que causó víctimas mortales el 24 de octubre de 2024. Todavía estaba en prisión preventiva cuando su familia se enteró el 27 de enero, presuntamente una semana después de ser trasladado a la clínica con las lesiones, ya que se les dijo que no podria asistir a su audiencia judicial debido a su estado de salud. La familia creyó que habia sido apaleado bajo custodia. Hubo informes que tenía heridas graves en la cabeza y marcas de estrangulación en el cuello.

El 6 de mayo, el Ministerio de Justicia publicó un vídeo de 30 minutos de cintas de prisión del 21 al 23 de enero, alegando que Ioseb Gorgadze no fue sometido a violencia en prisión. El ministerio dijo que el material completo era demasiado grande y no podía hacerse público, pero que la investigación y la familia del prisionero muerto lo tienen.